En estos días que se ha legalizado el aborto en Argentina, recuerdan en la radio el lema que en los 70 fue defendido por María Elena Oddone: No a la maternidad. Sí al placer.
Desde mi punto de vista profesional, utilizar mensajes negativos en los lemas para provocar o llamar la atención es un recurso interesante pero difícil de aplicar.
En este caso concreto me llama la atención dos cosas:
- Que un movimiento cuyo principal valor está en la libertad de elección, enarbole un lema que limite esa libertad.
- Que diga que no a una característica biológica que sólo tiene la mujer, una característica que la hace única.
Vanessa Lizarralde